Para muchas personas, la pérdida de su trabajo, puede resultar una verdadera tragedia; tal es el caso de aquel jefe de hogar que depende de su empleo para mantener a su familia.
O de aquel otro, ya veterano trabajador, que en vísperas casi de su próxima jubilación, ve trunco su retiro ante el cierre de su fuente de trabajo por un despido inesperado; tal cual sea el motivo, el tema es que se puede hacer para evitar tales males.
En principio deberíamos determinar cual son las causas que motivan este flagelo; distintos investigadores de la Universidad Nacional de Colombia, indican que el fracaso de las políticas del gobierno así como la falta de preparación profesional pueden ser las principales razones por las que más de 2 millones y medio de colombianos hoy no tienen empleo.
Continúan afirmando que la reforma laboral no generó todos los empleos que se hubieran esperado; aunque con la política gubernamental se han creado más de 350.000 nuevos empleos en el último año, las empresas sólo están contratando empleados temporales y esos son fáciles de descartar al término de sus contratos.
Por otro lado, la ayuda oficial que reciben algunos empresarios no alcanzaría para cubrir a veces los costos que se realizan para generar los puestos; a esto se debería agregar que los sectores que evidencian un mayor crecimiento económico no son siempre aquellos que generen mayor oportunidad de empleo; como ejemplo daremos el sector minero, del que dependen el 50% de las exportaciones en nuestro país y sólo se emplean al 1% de todos los ocupados.
Asimismo, según se desprende de las declaraciones vertidas por algunos miembros del SENA, expertos en el tema, opinan que “ a pesar de que existen programas donde la gente puede inscribir sus hojas de vida en buscadores gratuitos de empleo, con la esperanza de encontrar el empleo deseado, algunos tardan más de dos años en obtener una primer entrevista; incluso muchos de los empleos se desperdician porque la gente no llena debidamente los formularios del perfil, y esto se debe fundamentalmente a la falta de capacitación y experiencia adecuadas.”
Expuestas algunas de las razones propuestas como causas del desempleo en Colombia, debemos hacer hincapié en la necesidad de aumentar los índices de capacitación, tanto escolar como laboral, incrementando los cursos teóricos y prácticos desde la escuela, incentivando la concurrencia a los mismos, no sólo desde el Estado sino también desde el seno familiar; es indudable que la base de una economía plena de empleo es la experiencia y capacitación de sus integrantes.